Todavía queda por saber los datos del siempre optimista mes de diciembre, pero el Instituto Nacional de Estadística ya nos ha podido ofrecer las cifras relacionadas con el comercio durante el mes de noviembre y siguen siendo positivas.
Con respecto al mismo periodo del año 2014, en noviembre de 2015 se consiguió un repunte en comercio del 4,2%, lo que supone una mejora del sector en positivo durante ya 15 meses consecutivos.
Respecto al mes de octubre se desciende en realidad una media de 0,5% a pesar de las campañas de descuentos como el Black Friday o el Cybermonday que, además, se confía en que no hayan afectado negativamente a las compras navideñas. Pese a todo, el balance del año es completamente positivo.
El comercio por sectores
El INE también ha ofrecido los datos de crecimiento del comercio por sectores, con lo que es posible conocer dónde es preferible invertir en este sentido. Llama la atención que las pequeñas cadenas son las que mayor subida han experimentado (4,5%), reflejando con ello una recuperación clara del pequeño comercio que hasta el momento estaba sufriendo el empuje de grandes almacenes y una bajada constante de precio.
Le sigue como sí es más predecible el sector de las grandes cadenas (4,4%) que por fin han podido reflotar unos años de crisis económica, con nuevas contrataciones y aumento en las ventas que, como es lógico, deberían continuar en el mes de diciembre con las compras navideñas como principales protagonistas.
Las empresas unilocalizadas (4%) y las grandes superficies (3,7%) son las siguientes en el crecimiento de noviembre en el sector del comercio en España. En el cómputo global, no sólo noviembre, sino todo 2015 ha sido un año que debe analizarse con una visión optimista para el sector, para lo que es posible encontrar varias causas.
La primera de ellas es la recuperación de la crisis económica. El aumento de puestos de trabajo y una mayor liquidez por parte de las familias ha fomentado la recuperación de uno de los sectores que más había sufrido por la recesión.
Además, la confianza económica respecto a un futuro cercano motiva a muchos compradores a invertir su dinero. Desde las compras rutinarias hasta aquellas relacionadas con un disfrute a medio plazo están experimentando un crecimiento constante.
Por descontado, a todo ello ha de unirse una reducción del precio de los bienes de consumo que por fin parece que se ha estabilizado, dificultando en parte la recuperación de los comercios a cualquier nivel, pero al menos ofreciendo una estabilidad económica que permita afrontar 2016 con mayor optimismo si cabe.