Parece que la industria del comercio electrónico sigue en racha en Europa. Tal como se desprende del último informe del European B2C E-commerce, las ventas realizadas a través del comercio electrónico en todo el continente alcanzaron el pasado año 2014 los 423.800 millones de euros de facturación. Esta cifra supone un incremento de un 14.3%. A pesar de que la tasa de crecimiento parece haberse reducido frente a los datos de años anteriores, la industria del comercio electrónico en el viejo continente sigue en auge.
El conjunto de la Unión Europea, a través de sus 28 estados miembros, contribuyó con 368.700 millones de euros a la facturación antes citada, aproximadamente el 87% del e-commerce europeo. Hablamos del comercio electrónico B2C, es decir, Business to Consumer, el que se realiza entre la empresa con su cliente.
Se espera que la tendencia europea al alza de las ventas a través de Internet continúe en 2015, con cifras de crecimiento en torno a 12.5%, y se espera que alcance los 477 millones de euros. Estas cifras dan idea de la importante relevancia que tiene el comercio electrónico en la economía europea. De hecho, representa un 2.45 del PIB en Europa, más del doble que hace sólo 5 años. Las previsiones para el año 2020 se sitúan en torno al 6%.
Se estima que de los 818 millones de europeos, 564 utilizan Internet y, de ellos, 331 millones compran a través de Internet (aproximadamente el 40% de la población).
Según los expertos, el e-commerce contribuye a la economía europea, entre otras cosas, a través de la creación de puestos de trabajo. Las estimaciones señalan 2,5 millones de nuevos puestos de trabajo relacionados con esta actividad y se prevé que vaya en aumento. Otro valor indicativo del auge del comercio electrónico en Europa es el número de websites dedicados a la venta electrónica, que ha crecido en 65.000 en el último año, situándose el total de plataformas de venta online en 715.000.
Por su parte, el Reino Unido cuenta con el mercado de e-commerce más potente de todo el continente, que aumento un 14.7% durante 2014 con 127.100 millones de euros facturados. Alemania y Francia se sitúan en segundo y tercer puesto, aunque con un crecimiento algo menor: 12.13% (71.2 billones de euros) y 11.2% (56.8 billones de euros), respectivamente. Según recoge este informe, Rusia ocupa el cuarto lugar en cuanto a volumen de negocio e-commerce europeo, con 18.8 millones de euros. En el caso de España contribuye a los datos globales con 16.9 millones de euros.