H&M cierra el año 2015 de una forma bastante positiva, aunque no tanto optimista. El balance anual se queda en 834 millones de euros de facturación, una mejora con respecto al mismo periodo de ejercicio fiscal del año anterior del 11%.
Concretamente España ha sido uno de los países que más ha impulsado este crecimiento. En la Península Ibérica H&M ha conseguido facturar 210 millones de euros, un 10,4% más que el año pasado. Esto ha convertido a España en el octavo mercado más importante a nivel de ingresos en el que la compañía está operando. 2015 se cierra además con 165 tiendas en todo el país, 6 más que en 2014.
De hecho, España está convirtiéndose en uno de los países más atractivos para los distintos grupos de venta de ropa al por menor, como se está demostrando con la apertura continua de tiendas en todo el territorio español.
La recuperación económica y una adaptación de los precios de mercado y la calidad de los productos permite que empresas como H&M, Primark o cualquiera del grupo Inditex consigan beneficios cuantiosos cuando abren tiendas tanto en entornos urbanos como a las afueras de las ciudades o, por descontado, en tiendas comerciales.
Sin embargo, Inditex parece ya no sólo estar lejos de la competencia, sino estar afianzando su posición como primer grupo mundial del sector con una distancia cada vez mayor. De hecho, H&M ha presentado sus datos de facturación en 2015 con una piedra en el zapato, un cuarto trimestre que ha sido desastroso con respecto al positivismo del resto del año.
La compañía ha argumentado ciertos factores no del todo convincentes. Por ejemplo, considera que la fortaleza del dólar ha supuesto un aumento de los costes por encima del previsto. El problema es que el dólar acoge 2016 con mucho optimismo y podría ser uno de los años con más movimientos alcistas desde hace tiempo.
Por otro lado, H&M también argumenta el aumento de las temperaturas, como una razón para no vender tantas prendas de temporada de invierno como en otros años. Hay que tener en cuenta que este tipo de ropa es el que normalmente más beneficios ofrece a las compañías pero en teoría la empresa este año habría podido vender mucha menos ropa de abrigo, primando con ello una moda más ligera y económica. Sin embargo, esto contrasta con lo obtenido por Inditex que no parece haber acusado el mismo problema y ha cuadruplicado los beneficios netos que H&M ha conseguido este pasado año.