El más importante índice de referencia hipotecaria en Europa ha vuelto a estar en positivo. Lo hace por primera vez desde que en 2016 entrase en el terreno negativo.
La guerra en Ucrania y la inflación son los dos principales motivos que han impulsado en ascenso al Euribor y lo previsible es que se mantenga así el resto del año. Esto afectará a todas las hipotecas existentes bajo este índice, así como también endurece las condiciones de los bancos para nuevas concesiones.
En este artículo encontrarás:
Subida del Euribor a 0,005%
El Euribor se mantenía en valores negativos desde el año 2016, pero durante los últimos meses ha iniciado una escalada, en la que todavía no se identifica ningún síntoma de freno.
El martes 12 de abril se situó por primera vez en positivo, con un 0,005%. Este valor se debe a que ha estado subiendo hasta medio punto desde hace 3 meses.
Varios factores han tenido su influencia en esta evolución. La Asociación Hipotecaria Española (AHE) identifica como principales motivos la guerra en Ucrania y la inflación estable que está asentada en prácticamente toda la Unión Europea.
El Banco Central Europeo (BCE) también ha cambiado de rumbo, al comunicar en marzo que poco a poco se van a ir quitando los estímulos activados para afrontar la pandemia. Sus primeros efectos los veremos en junio.
Se trata de una suma de factores que al final han llegado a afectar también al Euribor y, con él, al precio que los propietarios tienen que afrontar por sus hipotecas.
Además, la previsión sobre el Euribor se mantiene en ascenso. Lo más probable es que llegue en diciembre de 2022 a un valor en torno al 0,4% y que mantenga el mismo ritmo durante el año 2023.
Efecto sobre las hipotecas
Basándonos en el valor actual del Euribor, en comparación a su último cálculo, el incremento de este índice supone también que las hipotecas se encarecerán.
Los que tengan una hipoteca basada en el Euribor (tipo variable) tendrán que afrontar una media de 384 euros más al año, aproximadamente 32 euros más cada mes.
Las hipotecas basadas en Euribor se recalculan cada 6 o 12 meses según la entidad acreedora, por lo que este importe puede aumentar en la siguiente valoración que se haga antes de 2023.
Además, es previsible que los bancos impongan condiciones económicas más exigentes a la hora de conceder nuevas hipotecas, con el fin de evitar que aumente el riesgo de mora.