Hace unos días en Portugal se celebró la primera subasta de capacidad solar fotovoltaica en el país, lo que ha generado bastante expectación, sobre todo por las empresas energéticas que han tenido la oportunidad de invertir en ella.
Una de estas compañías ha sido la española Iberdrola que, al final, ha conseguido consolidarse como la principal inversora de la subasta, al adquirir la mayor cantidad de lotes disponibles.
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Objetivos y necesidades de la inversión en Portugal
Las autoridades portuguesas tienen un claro objetivo con esta subasta, que consiste en triplicar la generación de energía con respecto a la que puede aprovecharse ahora mismo.
Sin embargo, esto plantea un enorme reto para las empresas interesadas, dado que además de la inversión en la propia subasta, tendrán que hacer frente a la construcción de plantas solares prácticamente desde cero.
Si bien en principio se indicaba un plazo de ejecución de 36 meses desde la celebración de la subasta, en la práctica se ha reconocido bastante difícil de alcanzar este objetivo y, en principal medida, por el retraso que las licencias ambientales podrían experimentar.
Interés de invertir en Portugal
Iberdrola ha tenido importantes razones por las que volcar una importante inversión en el país vecino. En primer lugar por el precio de los lotes.
El más económico con 150 megavatios (MW) ha llegado a ofrecerse por 14,76 euros por megavatio/hora (MWh), lo que constituye hasta ahora el valor más bajo que en todo el mundo se ha comercializado este recurso.
De hecho, se considera que la subasta en Portugal ha logrado precios excelentes para todos los participantes. Por ese motivo también Iberdrola ha decidido volcar parte importante su inversión en energías renovables este año en el país luso.
Otro motivo de especial relevancia consiste en la oportunidad solar que ofrece el país. Como sucede también con el resto de la Península Ibérica, Portugal tiene durante prácticamente todo el año meses de continuo sol.
Esto ofrece muchas opciones de rentabilidad para las plantas solares que terminen construyéndose en el país. Portugal podría convertirse en muy pocos años en uno de los países con mayor generación proporcional de energías renovables.
En lo relativo al precio que puede repercutir al consumidor, dependerá más de la propia evolución que el sector de energías renovables protagonice en los próximos años. Pero de forma general, la inversión de empresas importantes como Iberdrola, debería garantizar un coste del consumo óptimo, para la sociedad portugesa.