Casa Tarradellas tiene como propósito de Año Nuevo mejorar considerablemente su posición en el sector, pese a que ya es uno de los actores más importantes.
Para crecer hay que invertir, así que la empresa catalana acaba de firmar una inversión importantísima, con la colaboración de la no menos destacable compañía Nestlé.
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Inversión en la división Herta
El objetivo de esta inversión ha sido Herta, una división cárnica de Nestlé, con un potencial de producción y logística muy importante.
La compra de esta división supondrá la creación de una nueva sociedad que dirigirán conjuntamente tanto Casa Tarradellas como Nestlé.
La empresa catalana se quedará con el 60% de la nueva sociedad, mientras que Nestlé lo hará en un 40%.
Una inversión de 400 millones
No se han ofrecido cifras oficiales de lo que ha podido costar esta inversión, sin embargo, los analistas sí que creen saber aproximadamente cuánto puede haber supuesto.
La operación habría sido de unos 400 millones de euros. Para poder concluir que se ha llegado a esta cifra, se basan en la valoración actual de la compañía.
Herta está valorada como empresa cárnica en 690 millones de euros, en base a una facturación de 667 millones. Por tanto, la inversión de 400 millones representaría una jugada más estratégica que de rentabilidad.
Por qué interesa Herta a Casa Tarradellas
Los beneficios de la nueva empresa son notables para Casa Tarradellas. Herta es una empresa cárnica destacable por productos de charcutería y carnicería. Permitiría así a la empresa mejorar y ampliar en variedad todo su catálogo de productos.
Pero además, esta división está también especializada en masas para pasteles y para pizza, en Francia y Bélgica. Aprovechar esta localización y esta especialización, mejora considerablemente las perspectivas de ambas empresas para expandir sus operaciones comerciales.
Obviamente de la logística de Herta se extraen las opciones de expansión internacional de Casa Tarradellas y Nestlé. Ambas podrán mejorar su posición comercial en el sector de masas y carne en diferentes países europeos, a medida que la nueva sociedad comienza a aprovechar todo su potencial.
En todo caso, la operación llevará su ritmo, no ofrecerá efectos inmediatos. Según se estima, se cerrará durante el primer semestre de 2020, así que tendremos que esperar para ver exactamente qué consecuencias tendrá esta inversión en las estrategias futuras de Casa Tarradellas y para todo el sector cárnico en general.