Microsoft sigue resurgiendo en muchos ámbitos empresariales. En la actualidad, la compañía tecnológica dirigida por Satya Nadella, ve como muchas otras la mayor rentabilidad en los negocios en la nube.
Sin embargo, no puede jugárselo todo a una carta y, por este motivo, sigue invirtiendo en nuevos desarrollos. Uno de los que más le solicitaban inversores y usuarios era su navegador de Internet.
Hace tiempo ya que Internet Explorer tuvo que ceder terreno a la voraz competencia. Google Chrome y Mozilla Firefox dominan el mercado de una forma aplastante. La compañía tecnológica creadora de Windows, en navegadores solo abarca una cuota del 1,6%.
En parte por este motivo, en parte también por la poca efectividad que Internet Explorer ha podido demostrar en los últimos años y también porque toca siempre renovarse o morir, sobre todo en el terreno tecnológico, Microsoft ha tenido que invertir en algo nuevo. Se llama Edge Chromium.
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La inversión conjunta de Microsoft y Google
Lo más sorprendente de esta noticia no es el hecho de que vayamos a decir adiós a Internet Explorer. Es algo que muchos usuarios comprendíamos desde hace tiempo que era inevitable.
Lo realmente chocante es que en la inversión se encuentran de forma conjunta Microsoft y Google. El gigante tecnológico ha ofrecido su código, para que sobre él se base el desarrollo de Edge Chromium, un nuevo navegador que ya está disponible para descargar de manera gratuita y que se impondrá por actualización en Windows 10 a lo largo del año 2020.
Por tanto, algo importante a tener en cuenta de Edge Chromium es que es un proyecto de código abierto, algo que no suele ser corriente en Microsoft y que demuestra el cambio de rumbo que la compañía viene tomando desde hace un tiempo.
De hecho, no solo se basa en Google Chrome. Para su desarrollo, se ha tomado como ejemplo algunos casos de éxito de navegadores más limitados en su uso, como Amazon Silk, Samsung Internet, Vivaldo o el de Opera.
¿Diremos adiós definitivamente a Internet explorer?
Microsoft invierte así en un nuevo desarrollo tecnológico, que no da cabida a su anterior modelo, el que representa Internet Explorer.
Hablando a largo plazo, sí que es el adiós de este navegador y en el futuro no estará disponible en ningún dispositivo. Sin embargo, no es una realidad plausible a corto plazo. En un proceso que puede abarcar años, Edge Chromium se irá implantando como el navegador por defecto de Microsoft, para todos los usuarios que deseen aprovecharlo.