Los hombres más ricos del mundo en la actualidad y en orden descendente son Bill Gates, con una riqueza que llega a los 80.000 millones de dólares; Warren Buffet, con 68.000 millones de dólares; y el español Amancio Ortega, con 64.000 millones de dólares. Ninguno de ellos vive en Pekín, pero la ciudad es todo un foco de atracción para los más millonarios. Concretamente para los que superan los mil millones de dólares, pertenecientes a un ranking de ciudades que albergan a estos codiciados ricos, porque su riqueza se mueve con ellos hacia negocios y actividades que siempre repercuten favorablemente en la ciudad.
Hasta el momento Nueva York estaba la primera en el ranking, con más «milmillonarios» del mundo. En la actualidad tiene a 95 de estos multimillonarios (se estima que en todo el mundo debe haber aproximadamente 2.188 personas en este estatus de riqueza). Pekín le ha ganado por cinco, es decir que en la capital china viven 100 multimillonarios, cuando en 2014 sólo vivían 68.
Teniendo en cuenta la desaceleración que está viviendo casi toda la zona de Asia es aún más sorprendente este aumento de «megaricos» en Pekín. Es más, a nivel estatal China es el país con más riquezas de este tipo, le sigue Estados Unidos y en tercer lugar está la India, que también está curiosamente en el ranking de países con mayor índice de pobreza.
Los analistas siguen intentando entender por qué mientras en el resto del mundo las fortunas decrecen o crecen de una forma más lenta por la situación económica global, en China y países de Asia parece una situación completamente opuesta, donde las grandes riquezas siguen en un aumento imparable y algunas nuevas aparecen por el camino.
Otro caso curioso de este ranking de riqueza es el que sitúa a Moscú como tercera ciudad con más ricos cuya fortuna se sitúa por encima de los 1.000 millones de dólares y, sin embargo, Rusia es como país el que más ricos ha perdido durante el año 2015. Cabe pensar que igual se han marchado a China, si bien las teorías argumentan un incremento del valor del sector tecnológico y manufacturero frente a negocios tradicionales que siguen en un constante declive, incapaces de recuperarse, de renovarse o de cambiar de rumbo, frente a unas empresas como Apple, Microsoft o Zara que no paran de evolucionar.
No obstante, es lógico pensar que lo de Amancio Ortega es una excepción, literalmente, entre miles de millones de personas. España está como país número 18 en lo que se refiere a los que incluyen a personas con riquezas similares a las de Ortega.