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Cada día tienen lugar en nuestro país numerosas operaciones inmobiliarias. Personas que compran viviendas para reformarlas y venderlas a un precio mayor y otras que compran viviendas para convertirlas en oficinas o en locales comerciales, por ejemplo. Pero, sin duda, la operación inmobiliaria más habitual es la de comprar una vivienda para alquilarla.
Invertir en propiedades para alquilar es una oportunidad bastante interesante. Expertos en el sector, como Rubén Otero, prevén que en los próximos años se produzca un desarrollo sostenible que permita obtener una gran rentabilidad. Y es que una vivienda alquilada te reportará un dinero regular todos los meses, estando el alquiler casi asegurado, ya que acceder a una hipoteca es ahora más complicado que hace unos meses.
Pero, además, hay que tener en cuenta que, en épocas de inflación, el dinero en el banco vale cada vez menos. En cambio, una vivienda casi siempre se revaloriza, con la ventaja de que es más fácil encontrar buenas oportunidades de inversión, ya que habrá propietarios que quieran vender rápidamente porque necesitan liquidez, lo que hace que los precios bajen.
En este artículo encontrarás:
Aspectos a tener en cuenta antes de comprar para alquilar
Para que este tipo de inversión realmente dé sus frutos, hay ciertos factores que deben tenerse en cuenta, sobre todo si se cuenta con experiencia previa. Invertir de forma apresurada sin sopesar bien la decisión solamente porque contamos con ciertos ahorros en el banco, puede traernos graves consecuencias.
1. Establecer la renta adecuada
La renta del alquiler tiene que ser lo suficientemente provechosa como para obtener ganancias después de hacer frente a los gastos, sin que tengas que poner dinero extra. En este sentido, hay que tener en cuenta los costes de mantenimiento, el IBI, el seguro de hogar, la tasa de basuras, la cuota de la comunidad, los suministros que se incluyan, etc.
Si fijas un precio demasiado alto, es bastante probable que tardes en alquilar la vivienda, lo que reducirá el margen de beneficio durante ese tiempo. Por eso, es conveniente acudir a un experto inmobiliario como Rubén Otero para que puedas recibir asesoramiento al respecto e intentar establecer un precio que realmente sea competitivo.
2. Elegir la vivienda adecuada
Un aspecto de vital importancia para que la inversión sea rentable es elegir la vivienda adecuada. Hay que valorar factores como el estado actual de la propiedad, la localización de la misma o el metraje. Después, es conveniente realizar un estudio de mercado para saber cuál es el precio medio del alquiler de una vivienda de estas características.
Pero también hay que tener en cuenta cuáles son las condiciones de la demanda y el perfil de inquilino de la zona. Por ejemplo, resultará menos rentable invertir en una vivienda de lujo en una zona más modesta o estudiantil que en una zona residencial más exclusiva.
3. Ten presentes las normas de los arrendamientos urbanos
Si es tu primera inversión inmobiliaria y no cuentas con referencias en este terreno, es recomendable que busques asesoramiento en cuestiones jurídicas. Intenta hacerlo antes de firmar el contrato para que todas las cláusulas se ajusten perfectamente a la nueva Ley de Arrendamientos Urbanos. Pero también es importante para establecer la renta, ya que el aumento anual está ligado al IPC. Debido a ello, es conveniente que te informes sobre las previsiones de inflación en los próximos años.
4. Contar con un colchón económico
Invertir todos nuestros ahorros en comprar una vivienda y quedarte luego sin nada no es lo más recomendable, puesto que si surge algún imprevisto no tendremos manera de afrontarlo. Por eso, es preferible dejar parte de nuestros ahorros en el banco para contar con un colchón económico, aunque tengamos que pedir una hipoteca. Con una buena negociación, los bancos pueden llegar a financiar incluso el 80% de una “segunda residencia” e incluso hasta el 100% si se trata de pisos de banco.
5. Contratar un seguro de impago
Se trata de uno de los aspectos más importantes que debemos tener en cuenta junto con el de hacer bien las cuentas de gastos. Para poder estar tranquilo, es conveniente contratar un seguro de impago. El importe suele ser de un 5% de la renta anual y estarás cubierto antes cualquier impago acto de vandalismo. Y, además, la compañía se ocupará de realizar todas las gestiones que sean necesarias.
En resumen, antes de comprar una vivienda para alquilar, Rubén Otero recomienda llevar a cabo un estudio detallado y preciso, de tal modo que se pueda valorar si la inversión es realmente rentable o no. Obviamente, invertir en una vivienda en los tiempos que corren es un negocio altamente rentable, pero no olvides que si no dispones de experiencia previa en este terreno, es fundamental buscar asesoría profesional.
